
Matías tiene cuatro años, es de Guatemala y es beneficiario del programa de casa de APAC.
Antes de visitar APAC, Mati no tenía un diagnóstico acertado, no hablaba y presentaba problemas motrices.
“Parecía un títere,” dijo Alejandra, su mamá, quien investigó sobre los avances de la atención a la parálisis cerebral en México. Ello llevó a los padres de Mati a realizar una colecta en la que alguien les habló de APAC y gracias a su deseo incansable de brindarle a su hijo la atención que necesitaba, Mati llegó a APAC en noviembre del año pasado.
Con el diagnóstico acertado de parálisis cerebral atetoide, Mati se adscribió a un programa en casa. Sus papás y él visitarán APAC cada seis meses y se llevarán una serie de instrucciones y material audiovisual para llevar a cabo las terapias en Guatemala. Ale dice que el programa es excelente, a pesar de las dificultades que implica el que sea a distancia.
“Todos han sido muy comprensivos y nos han proporcionado las herramientas necesarias para llevar a cabo las terapias en casa,” dijo.

Según Ale, en un principio fue difícil llevar a cabo las terapias; sin embargo, con la organización pertinente y con ayuda del material audiovisual, las terapias se volvieron parte de su día a día.
En sus visitas a APAC, Mati recibe terapia física, ocupacional, de lenguaje, y también recibe atención por parte de los médicos de APAC, así como de los servicios de nutrición, estomatología, psicología y órtesis.
Visitar México no ha sido sencillo para la familia de Mati, han hecho varios sacrificios, pero para su mamá, ha valido muchísimo la pena, pues la mejora en la calidad de vida de Mati es notable.
De acuerdo con Juana Hernández, quien encabeza el departamento de Comunicación y lenguaje en APAC, el avance de Mati ha sido impresionante.
“Lo valoramos en noviembre del año pasado y era un niño que no hablaba, sólo decía algunas palabras como mamá, papá o agua,” dijo. “En estos meses ha mejorado muchísimo. Ya dice frases de hasta tres palabras y muestra mucho interés en comunicarse, es muy notoria su intención de comunicarse con otros, algo que no sucedía cuando vino a valoración.”
